Este martes por la noche, y luego de 7 horas de debate, la Cámara de Diputados de la Nación aprobó la ley de etiquetado frontal en alimentos que tiene como objetivo advertir a los consumidores sobre los excesos de grasas, sodio y azúcares en los productos con el fin de ayudar a combatir la obesidad, la hipertensión y los riesgos cardíacos.

Si bien, el tema motivó fuertes intercambios de opiniones en la clase política, que se vieron replicados en los medios de comunicación y las redes sociales, algunos puntos importantes de esta nueva ley pueden no haber quedado claros.

 

 

 

 

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El etiquetado frontal facilitará al consumidor la lectura de la información nutricional de cada producto, dejando de lado la exclusividad de la famosa “letra chica”.

En resumen, a partir de ahora, se deberá indicar con un sello octogonal negro en el frente del paquete si se posee sal, azúcar, grasas o calorías en exceso. En caso de que se posea uno o más de estos sellos, no se podrá publicar con personalidades, sorteos, dibujos animados o sorteos.