11.3°La polémica por las peleas nocturnas
Collins descartó que los desórdenes en la noche se relacionen con la campaña
Lo dijo en una entrevista con El Litoral. El secretario de Control había dicho en un programa de radio que las peleas del fin de semana habían sido “premeditadas”.
De la Redacción de El Litoral
El lunes a la mañana, el secretario de Control de la Municipalidad, Cornelio Collins, sorprendió a todos cuando en un programa de radio (“Ahora vengo”) dijo que los incidentes del fin de semana en la Recoleta y en la zona de bulevar habían sido premeditados.
“Ha habido un prolijo tour de piñas en la ciudad en la madrugada del día domingo en respuesta a la nota del sábado (que publicó El Litoral). Yo creo con seguridad que estos hechos son premeditados, son hechos armados en la inteligencia de crear desorden”, aseguró Collins, en el programa que conduce Luis Mino.
La fuerte denuncia generó repercusiones en el Concejo Municipal. Alejandra Obeid, concejal justicialista, presentó un proyecto de comunicación para que el secretario de Control “aclare sus dichos” (ver Las críticas de Obeid)
Esta mañana, Collins aceptó una entrevista con El Litoral vía mail. El funcionario le bajó el tono a estas declaraciones y confirmó que no realizó una denuncia formal. También aseguró que no cree que las peleas y desórdenes del fin de semana hayan sido planificados por algún sector político, en el marco de la campaña electoral.
—¿Usted cree que las peleas del fin de semana fueron planeadas por algún sector en particular?
— Tengo la sensación de que algún grupo de público itinerante en la noche (no pertenecientes a un sector u organización alguna, lo he descartado) produjo estas golpizas como respuesta a un reconocimiento hecho público sobre la tranquilidad de la noche.
— ¿Si los desórdenes fueron premeditados, tienen sospechas de quiénes fueron los responsables, lo están investigando?
— La premeditación a la que aludí es la motivación pensada para crear una situación de desorden. Desconozco los autores, no obstante estamos consultando a la Policía sobre las investigaciones que realizan, y no me he referido a un caso penal concreto sino que hice apreciaciones que tienen raíz en los comportamientos de los grupos en público, es decir, de tipo sociológicas.
En otro tramo de la entrevista, Collins procuró aclarar a qué se refiere cuando habla de comportamientos en público de jóvenes y adolescentes. “En el tránsito y en la concurrencia a los locales nocturnos en ocasiones suceden provocaciones a la autoridad”, sigue el funcionario. Se refiere, según sus propios ejemplos, a los menores que se convocan a través de las redes sociales para ingresar a los boliches (una situación que se produjo durante el fin de semana según el funcionario), o a jóvenes que corren picadas en la Costanera para desafiar a la policía o los inspectores de tránsito.
“A este tipo de actos me refería cuando expresé que sentía que existen personas o grupos que deliberadamente provocan desórdenes, lo atribuyo a conductas personales”, argumentó Collins, y volvió a insistir en que no sospecha “que estos hechos estén vinculados con la actividad política de la ciudad”.
Las críticas de Obeid
La concejal justicialista Alejandra Obeid presentó un proyecto de comunicación en el Concejo -y también le envió una nota a Collins-, para que el secretario de Control ratifique sus denuncias. “Consideramos que en sus declaraciones radiales ha efectuado serias y graves imputaciones refiriendo a que lo sucedido obedece a estrategias armadas y premeditadas para armar desorden y generar violencia”, plantea la concejala.
En los medios, Obeid lo cruzó fuerte al funcionario: “No puedo creer las palabras de Collins, es un irresponsable; no puedo entender cómo un funcionario público habla con tanta liviandad sobre este tema, que hable de un tour de piñas y de una inteligencia para crear desorden en la ciudad... la verdad no lo puedo creer. Si va hacer una denuncia que la haga seriamente y responsablemente como corresponde, que presente pruebas de lo que dice”.
La premeditación a la que aludí es la motivación pensada para crear una situación de desorden. Desconozco los autores, no obstante estamos consultando a la policía sobre las investigaciones que realizan”
Cornelio Collins
Secretario de Control
