La cadena que reúne a productores e industriales, planteó además que los embarques generan este año recursos suficientes para atender la pandemia, y que está "en vía muerta" el proyecto para generar más divisas.
Crédito: Gentileza
El Consejo Agroindustrial Argentino anunció que pedirá al presidente Alberto Fernández una audiencia para plantear su disidencia con el cierre de exportaciones de carne, que no logrará bajar precios internos según la entidad.
Advirtió además que "parece haber entrado en vía muerta" el proyecto de ley para incrementar exportaciones en U$ S15 mil millones anuales sin subsidios del Estado, generando 700 mil puestos de trabajo. "Con trabas vamos a destruir la economía y no vamos a bajar precio".
Durante una conferencia de prensa encabezada por José Martins, de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, el CAA planteó "no romper lo que funciona" y recordó que el sector generó 38 mil millones de dólares en 2020 y pasó a 45 mil millones de dólares este año.
"El Estado tiene ingresos extraordinarios que nos permiten atender pandemia y emergencias económicas", advirtió Martins, quien recordó que el Consejo no tiene representación gremial y se desmarcó de la dinámica de protesta de las entidades del campo que llevan adelante un paro en protesta por el cepo a las exportaciones cárnicas.
Reglas de juego
El vocero de la CAA señaló que la entidad mantiene su reclamo de "reglas de juego permanentes que promuevan la inversión" y "políticas de Estado a mediano y largo plazo" para "producción e industrialización" que genere riquezas y empleo.
Martins insistió en el camino de "producción, industrialización consumo y exportación" para aportar al "ordenamiento económico y financiero" del país y afrontar los problemas de 46% de pobreza, 12% de desocupación y 35% de ocupación informal.
"Si Argentina no produce no exporta" y quedamos atrapados en "círculos viciosos de mayor pobreza e informalidad y destrucción de calidad de vida".
Martins insistió en que el CAA no reemplaza a las entidades gremiales del sector, pero advirtió que "cuando existen políticas públicas que van en sentido contrario al que proponemos, nos vemos en la obligación de expresarnos". Por lo que insistió en la necesidad de "alertar que el camino de restringir exportaciones no soluciona el problema del mercado interno y nos va a hacer mucho daño".
"Somos resilientes", dijo Martins cuando se le insistió en que el gobierno no parece abrir caminos de diálogo conducente. Planteó en cambio "medidas efectivas privilegiando la paz social y sin perder de vista lo que hacen países que se dedican a exportar alimentos".
Inflación, problema macro
Incumplimientos y diálogo abierto