Un empresario brasileño del sector de la cerámica se suicidó esta mañana en medio de un seminario en el que participaban el ministro de Minas y Energía, Bento Albuquerque, y el gobernador del estado de Sergipe (noreste), Belivaldo Chagas.

El empresario se quitó la vida justo después del discurso del gobernador y antes de que hablara el ministro; el perfil del gobernador en Instagram estaba retransmitiendo el evento en directo.

Según la prensa local, Gitz estaba desesperado después de que su empresa, Escurial, entrara en bancarrota en febrero de 2018.

Poco después del suicidio, uno de los hijos del presidente Jair Bolsonaro, el concejal de Río de Janeiro Carlos Bolsonaro, criticó en Twitter la falta de seguridad a la que están expuestos los miembros del Gobierno.

En los últimos días, Carlos Bolsonaro también criticó a los responsables del Gabinete de Seguridad Institucional (GSI) del Gobierno, por no haber interceptado al militar que subió en un avión de la comitiva presidencial con 39 kilos de cocaína.

Sadi Gitz

Sadi Paulo Castiel Gitz era un empresario nacido en Porto Alegre el 13 de noviembre de 1948. El hombre se graduó en matemáticas, ingeniería mecánica y administación. En los años 80, llegó a Sergipe. El sujeto se desempeñó en la Superintendencia de Transporte y Tráfico (SMTT) y en la Compañía Municipal de Servicios Urbanos (Emsurb). También fue presidente de la Asociación Comercial y Empresarial de Sergipe (Acese).

En 1993, comenzó a operar una fábrica que se convirtió en una importante unidad de producción. Sin embargo, en los últimos años, la situación económica de la empresa empeoró y en mayo de este año más de 600 empleados perdieron su trabajo. 

Con información de Télam