La fiesta de Santa Fe y los incidentes
Lo que el clásico se llevó...
Siempre un Unión-Colón deja conclusiones, no sólo de lo que pasó, sino de lo que hay que planificar hacia el futuro para organizar ediciones venideras.
De la Redacción de El Litoral
Hay algo, dentro de muchas cosas, en lo que coinciden plenamente Germán Lerche —presidente de Colón— y Luis Spahn -presidente de Unión- y se resume en una frase: “Los dirigentes del fútbol no estamos preparados para organizar operativos ni garantizar la seguridad, porque no estudiamos para eso ni sabemos de qué se trata. Nosotros nos limitamos a acompañar a la Policía en lo que nos pide y en pagar los costos del operativo que solicitan”.
Con esta idea, para las dos clásicos en Primera, las dirigencias hicieron y cumplieron lo que pidió la Policía. Lo que sí es responsabilidad exclusiva de los clubes es la venta del poco espacio que tiene el visitante en este tipo de partidos: ni Unión ni Colón pueden volver a permitir el acampe varios días antes y los desmanes que se dieron con la venta de las entradas a los socios. Deben encontrar un sistema que sea menos peligroso para la integridad física de sus socios, por ejemplo usando la tecnología que está preparada para los grandes eventos.
En cuanto a las conclusiones, dio la impresión de que salió mucho mejor todo en el primer partido que en el segundo. Y si bien es evidente que el estadio de Colón con sus mejoras en los últimos tiempos (fue sede de la Copa América donde jugó la Selección Argentina con Messi) está mucho más apto que el de Unión para jugar un clásico, dio toda la impresión de que desde la estrategia de seguridad se falló mucho más en el clásico de este domingo que en el del año pasado.
Preguntas sin respuestas
—¿Por qué si estaba advertido que sólo ingresarían a los micros que ponía la Municipalidad en la cancha de Colón los 2.400 socios con sus entradas se desbordó todo?
—¿Por qué, como se advierte en el testimonio gráfico de ayer de El Litoral, los micros venían abarrotados de hinchas y socios, con y sin entrada, incluso con gente que irresponsablemente viajaba arriba del techo del colectivo?
—¿Por qué llegaron 500, 800 ó 1.000 hinchas más de Colón al sector visitante que ingresaron “de atropellada” y sin entradas, burlando los controles, quedando incluso muchos socios con su entrada en la mano?
—¿Por qué varios pudieron ingresar elementos cortantes y destrozar el alambrado si la Policía se cansó de anunciar como “gran innovación” que incorporaba detecta-metales para este clásico?
—¿Por qué Pitana decidió, siendo tan reglamentarista, empezar el clásico con el alambrado visitante roto y con 20/25 hinchas de Colón casi parados o colgados adentro de la cancha?
—Si los hinchas de Unión no podían salir de la cancha, ¿quiénes tiraron las piedras a los hinchas de Colón en la retirada de los micros cuando se dieron los principales incidentes?
—¿No estaba contemplado, en ese caso, con 35 micros estacionados en la Perón, un “rastrillaje” y vigilancia en las inmediaciones del sector visitante para evitar lo que pasó?
Sensaciones clásicas
En la fecha anterior a Unión-Colón se jugó Unión-Boca y todo se desarrolló con normalidad. Está claro que un clásico no se compara con nada, pero dio la impresión de que se falló en cuestiones que 15 días atrás no se falló.
Desde las esferas policiales se habla de un “operativo exitoso”, con las secuelas habituales y no graves de este tipo de partidos. Pero los números indican que hubo 50 heridos y no puede ser un dato menor.
El estadio de Unión es un estadio, por cuestiones de infraestructura y modernidad, mucho más vulnerable que el de Colón para un clásico: el botón de la muestra son los pulmones en Cándido Pujato y la Redonda. Pero quedó la sensación flotando de que, además, se falló en la prevención y en la estrategia.
En todo lo otro tienen razón los jefes policiales cuando hablan de “problema sociocultural” de fondo. ¿Cómo puede explicarse que una mujer concurra a la tribuna visitante con un bebé, o que muchos viajen parados arriba del techo de un micro con el riesgo que eso implica? No admite ninguna discusión.
También es evidente que a la tecnología hay que ayudarla con voluntad humana. De lo contrario, no sirve de nada. Ejemplo: ¿para qué tener sistema magnético de control de ingreso o lectura láser si los hinchas van a pasar por arriba de las máquinas?
La edición 80a. del clásico de Santa Fe mostró una gran fiesta de color en las tribunas, con las “gastadas” habituales pero la penosa postal final de las corridas, las piedras, las balas de goma.
Desde esferas extraoficiales cercanas al gobierno comenzó a cobrar fuerza una versión en las últimas horas y está vinculada con la decisión que se podría tomar —como pasó en La Plata con Estudiantes y Gimnasia— de “jugar los próximos clásicos en la ciudad de Santa Fe sin público visitante”. Sin dudas que es una medida que se adapta a la perfección de “muerto el perro, se acabó la rabia”. Obvio: se terminarían los incidentes. Y recontra-obvio: no van en la idea de negocio de los dirigentes de ambos clubes de intentar armar “dos clásicos de invierno” para, de paso, jugar más seguido y evitar lo que se da cuando pasan tantos años sin verse las caras como ah
Denuncia de Gustavo Abraham
El ex candidato a presidente por el movimiento opositor Futuro Sabalero, Dr. Gustavo Abraham, presentó una denuncia en la Justicia como hincha y socio sabalero, pidiendo que se investigue el origen de pintadas amenazantes en la tribuna visitante que ocuparon los hinchas de Colón en el clásico.
Del mismo modo, pidió que se investigue si es cierto que el agua de los sanitarios en el mismo sector visitante estaba contaminada. El fiscal López Rosas, que fue quien recibió la denuncia, inspeccionó el lugar en el 15 de Abril y ordenó la extracción de muestras líquidas para analizar.
“En cuanto a las pintadas amenazantes en la tribuna de Colón en la cancha de Unión, considero que no es distinto a los cánticos que se escuchan de una tribuna hacia la otra. En lo que hace a lo del agua, se arbitraron los medios y se enviaron las muestras a un laboratorio para analizar si había alguna sustancia extraña”, comentó el fiscal López Rosas esta mañana en Sol 91.5.

Falla 1: más gente
Nada de 2.400 hinchas
La foto es elocuente de cómo estaba el sector visitante del 15 de Abril, con la gente subida hasta el último lugar y al borde del vacío. Es cierto que hay irresponsabilidad de quien arriesga su vida, pero la pregunta es ¿por qué entró mucha más gente que las 2.400 entradas que la AFA le dio a Colón?
Foto: Pablo Aguirre

Falla 2: la irresponsabilidad
El problema “socio-cultural”
Viajar arriba del techo de un micro o colgarse de la parte más alta de una tribuna, con el riesgo que eso implica para la propia vida de la persona. En estos detalles es donde queda al desnudo lo que pasó: falta de colaboración de algunos, pero falta de previsión policial.
Foto: Pablo Aguirre

Falla 3: estadio vulnerable
Casi no existe el pulmón
La foto es del gol de Iván Moreno que lo ponía a Colón 2-0 en el clásico, ganándole a Míguez en las alturas. De fondo se puede ver lo que es la división de las hinchadas en el llamado pulmón de calle Cándido Pujato. Contra Boca no pasó nada, con Colón sí.
Foto: Amancio Alem

Falla 4: alambrado destrozado
Burlaron los detecta-metales
Para romper el alambrado de la manera que lo hicieron, los violentos ingresaron elementos cortantes (¿pinzas?) y terminaron viendo el partido casi desde adentro mismo de la cancha. Acá hubo responsabilidad clara de Pitana -reglamentarista con los dos DT y con las amarillas- que miró para otro lado.
Foto: Amancio Alem
La foto /// Correa, el uruguayo salvador
...Al delirio tatengue

Estando dos goles abajo en un clásico, todo parecía casi imposible para el Unión de Frank Darío Kudelka. Pero primero llegó el descuento de “La Joya” Diego Jara y luego el testazo del “Coto” Nicolás Correa para sellar el 2-2. En el festejo, se le fueron todos encima al zaguero charrúa en el arco de la Redonda. Foto: Amancio Alem
La foto /// Moreno, el “Torero” goleador
Del festejo sabalero...

No existe un volante en la actualidad del fútbol argentino que tenga más goles que Iván Moreno, el carrilero sabalero. La estadística quedó confirmada en el 15 de Abril porque el nacido en Badajoz se despachó con un doblete. “Hubiera preferido no marcar pero ganar el clásico”, dijo el ex Banfield, Rosario Central y Estudiantes. Foto: Pablo Aguirre.
Colón-Newell’s: a las 17
Ayer lo anticipó El Litoral en su web a la tarde: la negativa del Ministerio de Seguridad para que el juego del viernes entre Colón y Newell’s se dispute a las 21.30, como había programado la AFA en su momento.
Si bien los medios rosarinos dan cuenta de que tanto Lerche como Lorente -presidentes de ambos clubes- estaban haciendo gestiones para jugar a las 19, El Litoral está en condiciones de informar que la postura de los responsables de la seguridad enviaron una nota inflexible a la AFA pidiendo que “el partido empiece y termine con luz solar”, por lo que el horario confirmado es el de las 17 del viernes, con lo cual las reservas jugarían en otro momento y en otro lugar, como pasó con el clásico.
Los incidentes en el clásico santafesino, con choques de hinchas sabaleros y la policía, la interna de la barra de Newell’s y la desmejorada relación entre ambas hinchadas son los argumentos que se exhiben desde el Estado para pedir que Colón-NOB arranque el viernes a las 17.
Por lo pronto, la AFA programó Estudiantes-Lanús para las 21.30 y dejó el choque de rojinegros para el primer turno de las 19.10, que finalmente será el de las 17. Ahora, el otro tema es buscar pantalla en “Fútbol para Todos”.