Escándalo por corrupción en Alemania
Renunció el presidente Christian Wulff
La dimisión del primer mandatario germano se produjo luego de que la fiscalía solicitara su desafuero. Angela Merkel, anunció la búsqueda de un candidato de consenso.

Christian Wulff, anuncia su dimisión en una comparecencia pública en el Palacio de Bellevue de Berlín, ante las acusaciones de corrupción y tráfico de influencias en su contra. Foto: Agencia EFE
de la Redacción de El Litoral
Agencias EFE y DPA
El presidente de Alemania, Christian Wulff, anunció hoy su renuncia en una breve aparición pública en el Palacio de Bellevue ante las acusaciones de corrupción y tráfico de influencias en su contra.
La solicitud de la fiscalía de Hannover, en el norte del país, al Bundestag (Parlamento federal) de que levante la inmunidad de Wulff para abrir una investigación en su contra fue el detonante final de la dimisión del presidente, que llevaba semanas tambaleándose en el cargo.
‘Alemania necesita un presidente que cuente con un amplio respaldo de la población‘, dijo el ya presidente saliente al reconocer que este no es el caso en estos momentos, tras la previsible actuación de la justicia en su contra.
“Estoy convencido de que (las investigaciones) conducirán a un total descargo (de mi persona)”, afirmó Wulff, quien admitió haber cometido errores, pero aseguró haber sido “siempre honrado” como presidente de Alemania y anteriormente como jefe del gobierno del estado federado de la Baja Sajonia.
La reacción de Merkel
Por su parte, Angela Merkel, anunció la búsqueda de un candidato de consenso con la oposición tras la dimisión del presidente. Así mismo, señaló que había recibido la noticia con “gran respeto” y “gran pesar”, y afirmó que el presidente saliente y su esposa Bettina representaron “con dignidad” a Alemania durante los casi 600 días en el cargo.
Merkel subrayó que “uno de los fuertes de nuestro estado de derecho es que trata a todos por igual, sin importar el cargo que ocupe” al valorar la actuación de la fiscalía de Hannover.
Los festejos de la oposición
Por su parte, la oposición socialdemócrata y verde celebraron la dimisión de Wulff, que debía haberse consumado hace tiempo, según manifestaron sus portavoces, así como la disposición de Merkel a negociar un candidato conjunto.
La líder parlamentaria verde Claudia Roth definió las exigencias de la oposición al comentar que “la candidata o candidato debe devolver al cargo lo que ha perdido últimamente: credibilidad, fidelidad a la verdad y respeto”.
El presidente de los socialdemócratas, Sigmar Gabriel, señaló que su formación esta lista para consensuar “un nuevo comienzo.
Estamos muy contentos de que el nuevo comienzo, que ofrecíamos desde hace meses, ahora sea posible tras la dimisión de Wulff”.
Hasta la elección de un nuevo presidente de Alemania, el puesto de máximo mandatario germano será ocupado por el presidente del Bundesrat, la Cámara alta o de los Länder, que actualmente ostenta en turno rotatorio el jefe del Gobierno de Baviera, Horst Seehofer.
Las últimas acusaciones contra Wulff tienen su origen, al igual que las anteriores, en su etapa como jefe de gobierno del estado federado de la Baja Sajonia y sus relaciones con el productor cinematográfico David Groenewold, que también es investigado como presunto corruptor.
El presidente más joven y más breve
Con 51 años accedió Christian Wulff al Palacio de Bellevue, y apenas 19 meses después, abandona su cargo como primer mandatario.
Wulff, un potente barón regional, se impuso en la sucesión frente al ex disidente de la RDA Joachim Gauck, presentado por la izquierda. La votación parlamentaria se convirtió en la más reñida que se recuerda en una elección emblemática como la presidencial.
En su primer discurso en el día nacional destacó que, tal como la fe cristiana y la hebrea eran parte de la idiosincrasia alemana, ‘ahora también el Islam -agregó- pertenece a Alemania‘. Ahora también era muy esperado su discurso en el acto en honor a las víctimas de una serie de asesinatos perpetrados por neonazis. A diferencia de su predecesor, que intervenía con frecuencia en opiniones sobre economía, Wulff se mantuvo muy al margen de toda la crisis del euro.
El ahora ex mandatario, proviene de un medio muy sencillo y de una familia rota de la que hubo de ocuparse.
Su nombre sonó con frecuencia ya como alternativa o futuro heredero de Angela Merkel en el Ejecutivo. En cambio, varios observadores vieron que la canciller más bien lo apartaba hacia una función representativa cuando lo impuso como jefe de Estado.
El diario “Bild”, fue el encargado de aumentar el escándalo destapando un romance y un hijo extra matrimonial, que llevaron a Wulff a una ruptura familiar y a la presidencia con un niño pequeño en brazos.
Los observadores creen que, el gravoso divorcio, posiblemente predispusiera al entonces líder de Baja Sajonia a los favores ahora cuestionados. Un discurso posterior de Wulff en Lindau, a un grupo de premios Nobel de Economía, ha sido luego empleado contra él en el asunto del presunto abuso de influencias.
Wulff se casó durante campaña electoral para su segundo mandato como primer ministro regional en segundas nupcias con una asesora de prensa de 36 años con la que había tenido un hijo: “Acostúmbrense ahora a tener una joven presidenta” dijo a la prensa entonces. Sus hijos -ella trajo al matrimonio uno propio- han ocupado gran parte de su tiempo libre durante la presidencia.
Viajes gratuitos, fiestas, préstamos dudosos
Las denuncias que provocaron hoy la dimisión del presidente alemán Christian Wulff se multiplicaron a lo largo de los últimos dos meses.
Incluyen vacaciones gratuitas pagadas por empresarios, invitaciones a fiestas, créditos inmobiliarios muy ventajosos y facilidades para comprar bienes de consumo.
La gran mayoría de ellas se remiten a su época como primer ministro del estado federal de Baja Sajonia, que gobernó hasta 2010.
Los hechos más llamativos que denunció la prensa alemana en las últimas semanas son:
VACACIONES GRATUITAS: La fiscalía de Hannover investiga unas vacaciones que Wulff pasó en 2007 en la isla de Sylt, en el mar del Norte, a invitación del productor cinematográfico David Groenewold. Los gastos los asumió Groenewold, pero Wulff asegura que después le devolvió el dinero en mano, al contado.
PRÉSTAMO INMOBILIARIO: En 2008 Wulff recibe un crédito personal de la esposa de un empresario amigo, Egon Geerkens. El préstamo es de medio millón de euros y Wulff lo utiliza para financiar una casa particular para su segunda esposa. Ante el Parlamento regional de Baja Sajonia Wulff declara sin embargo no tener ninguna relación comercial con Geerkens, a quien incluyó en una comitiva oficial a China.
CRÉDITO BANCARIO: Para devolver el préstamo personal de Edith Gerkens, Wulff negocia un crédito con el banco BW-Bank, con tasas de interés muy ventajosas, por debajo del promedio habitual. En diciembre de 2011, después de conocerse la transacción, Wulff y el banco cierran trato por una hipoteca a largo plazo y a condiciones de mercado. La fiscalía no ve hasta ahora indicios para abrir un expediente.
LIBRO: En 2011 se revela que un empresario pagó la campaña publicitaria de un libro de entrevistas con Wulff publicado durante la campaña para las elecciones regionales de 2008.
VIAJES: En 2010 Wulff divulga una lista con seis viajes particulares que hizo entre 2003 y 2010, en mayor parte gratuitos, y en los que fue huésped de varios empresarios amigos.
LOBBY: Wulff destituye de forma inesperada a su portavoz, Olaf Glaeseker, sin dar mayores explicaciones. En su primera declaración personal ante los medios sobre el escándalo, pide perdón por el manejo del crédito y por no haber actuado con mayor transparencia. Entre tanto, Glaeseker es investigado por sospecha de corrupción.
INFLUENCIA EN MEDIOS: El 12 de diciembre pasado, se encuentra en gira presidencial por países árabes pero llama por teléfono al jefe de redacción del dairio más leído del país, “BILD”, Kai Diekmann, en un intento de influir la cobertura del diario sobre las denuncias sobre un sospechoso crédito bancario.