Ataque callejero
Loco y violento

Sobre el pavimento se puede observar el pedazo de mampostería que utilizó el agresor.
Foto: Juan de Dios
Ocurrió en Goyena y Peñaloza. Un incidente de tránsito desató la ira de un motociclista. Un lector del diario fue testigo y relata el suceso.
Redacción de El Litoral
“Ayer, a las 18, al pasar por Goyena y Peñaloza, veo una Trafic, dominio BCE 885, detenida en su marcha por Goyena, con orientación al este y su conductor “shockeado’ y con sangre en su rostro. Mayúscula fue mi sorpresa al ver que tenía la ventanilla, de su lado, destrozada de afuera hacia adentro. Alguien llamó a la policía y allí nacieron distintas secuencias: un patrullero llega, habla con el chofer (siempre en la cabina sentado) y sale en hipotética persecución por Peñaloza al norte.
“Me arrimo al chofer y único ocupante. Luego de decirle que no se mueva, que llegarían los servicios médicos, me dijo que un motociclista discutió por una posible mala maniobra, se bajó de la moto, tomó un ladrillo (yo diría ladrillazo), se lo tiró desde afuera hacia adentro (tenía la ventanilla alta y se la destrozó), lesionándolo.
“No conforme, antes de irse con marcha apresurada, le destrozó las dos ópticas delanteras.
“Luego llegaron dos patrulleros más, y dos ambulancias del Cobem.
Menuda tarea la de los servidores de sanidad, ya que debieron ingresar a la cabina llena de vidrios rotos para sacarlo al chofer con una camilla, para luego introducirlo a una ambulancia y llevarlo de prisa al hospital José María Cullen.
“Este hombre mayor de edad y de buen peso dejó en el lugar su camioneta.
Pocos minutos después, se hizo presente un hijo mayor de edad. La piedra puede verse en varias tomas, como así las tareas del personal policial y de las ambulancias.
“Hasta las 20, no se reportaron personas detenidas por el caso. Locos sueltos, si los hay...”.

Personal policial y del Cobem debieron actuar juntos para auxiliar al conductor agredido.
Foto: Juan de Dios