Un final con algo de escándalo para un partido caliente...
Giannini, las expulsiones, tres
hinchas de Colón y la ira del PF
Guillermo Fernández se enfrentó verbalmente con simpatizantes que estaban en la platea con camisetas de Colón. Giannini no quiso que le pasara lo de Platense-Instituto.

El festejo enloquecido
del final del partido. Así lo hicieron los integrantes del cuerpo técnico y los jugadores que estaban afuera. La hazaña estaba consumada y Unión se llevaba de Corrientes un punto de oro.
Foto: gentileza diario El Litoral de Corrientes
Enrique Cruz (h)
(Enviado Especial a Corrientes)
Pasó de todo. Primero, fue la tremenda falta de Maidana sobre Ricardone. En realidad, el pibe inició bien la jugada pues tocó al medio y fue a buscar la devolución en campo adversario; Pratto se la devolvió corta y al ver que no llegaba se arrojó en forma espectacular. Antes, Giannini había sido muy celoso en el cobro de muchas infracciones en la puerta del área rojiblanca y esto genero, después del partido, más de una queja contra su actuación. Pero en el segundo tiempo se produjo, en menos de un minuto, una acción en la que midió con vara diferente dos jugadas similares. Gutman fue al piso con todo contra Zurbriggen y el árbitro le mostró la amarilla. Enseguida, Jorge Torres se arrojó de la misma manera ante un rival, frente al banco de Unión, y enseguida le mostró la roja. Allí, Giannini perjudicó a Unión por no haber sido justo también en la acción de Gutman, quien tranquilamente se podría haber ido expulsado de la cancha. O bien, si fue amarilla para él, que también lo sea para el Coqui.
A todo esto, en la platea se encontraban, inexplicablemente, tres simpatizantes vestidos con camiseta de Colón, que previo al partido habían colgado una bandera rojinegra. Cuando Donnet hizo el segundo gol y, mucho más, cuando Giannini marcó el final del partido, el profesor Guillermo Fernández comenzó a gritar enfurecido apuntando a esos simpatizantes sabaleros que, por lo visto, lo habían hostigado durante el encuentro. Golpeándose la palma de la mano contra el pecho, el siempre correcto PF de Unión se llenó de ira como nunca se lo había visto. Y se originó un tumulto que obligó a una rápida intervención de Mauro Giannini.
Ya en el hotel, Giannini tuvo un breve diálogo con El Litoral:
—Mauro, ¿usted lo echó a Guillermo Fernández, el preparador físico de Unión?
—Sí, lo eché al término del partido, aquí tengo su credencial y estoy elaborando el informe.
—¿Usted vio que había hinchas de Colón en la tribuna de Boca Unidos?
—No, lo que vi fue la reacción de Fernández hacia la platea. Pero no observé eso que usted me comenta porque me resultó imposible hacerlo desde adentro de la cancha.
—¿Qué opina de esto que le estoy diciendo?
—Nada... Imagínese que los árbitros no podemos hacer nada al respecto. Es imposible que uno esté atento también a lo que ocurre afuera. Mucho menos que, por ejemplo y llegado el caso, ordene la salida de algún espectador de la cancha.
—O sea que a Fernández lo va a informar...
—Sí señor, lo voy a informar. Yo estuve muy atento a lo que pasaba en los bancos, porque no se olvide que dirigí Platense-Instituto.
—Claro, el día de la agresión entre Bonetto y Pascutti...
—¡No me pasa nunca más! Me muero si me vuelve a ocurrir una cosa semejante. Ese día, en cancha de Platense, no alcancé a ver nada. Obvio que si lo hubiese observado, habría obrado en consecuencia. Pero no vi nada. Y cuando terminó el partido y al ver la reacción enloquecida del banco de Unión, me fui corriendo hacia el lugar para evitar cualquier tumulto. Y allí vi lo de Fernández y por eso lo expulsé.
“No me gusta hablar de ellos, pero...”
Siempre correcto, el Turco Alí no quiso hacer demasiada referencia a la actuación de Giannini. Como todos en Unión, reprochaban la diferencia a la hora de medir dos infracciones similares, como la de Gutman y la de Torres. “Yo evito hablar siempre de los arbitrajes, ustedes me conocen y saben que soy así. No me gusta hablar de los árbitros, prefiero hablar siempre de mi equipo, pero hay cosas que colman la paciencia. Creo que hoy no fue justo Giannini”.
Sobre el trabajo de su equipo, el técnico tatengue señaló que “los jugadores se tienen que dar cuenta de que todo pasa por el convencimiento. Esto que hicieron hoy vale más que un punto, vale tres”.
Luego, el técnico analizó los últimos dos partidos: “contra Belgrano hicimos un buen primer tiempo y luego tuvimos un bache en el segundo. Hoy nos pasó algo parecido en el primer tiempo, aunque no jugamos mal. Después, con el partido 2-0, los muchachos se convencieron de que con actitud se podía empatar y lo lograron. Me voy muy contento con ellos”.
Sobre los cambios, dijo que “a Buján lo puse porque ellos habían puesto a Gómez para jugar por derecha y nos podían complicar. A Tarrito debía sacarlo porque estaba amonestado y por cualquier infracción podíamos quedaron con tres menos y lo mandé a Matías por derecha”.
Sobre la posición de Matías Donnet como doble cinco, dijo que “no lo vi mal, quizás le faltó tener un poco más la pelota, pero Matías es un jugador inteligente y claro. Esa posición es buena para él, porque le permite recibir y estar más cerca del área para intentar el remate desde afuera, como lo hizo dos veces en el primer tiempo”.
En cuánto al partido, dijo que “la idea era marcar a Gutman con Calgaro y que Matías lo encime a Amaya, que juega bien”.
Por último, sobre la dupla Guerra-Pratto, señaló: “A Claudio lo tuvimos lesionado casi toda la segunda rueda y recién ahora está bien. Es una alternativa válida que jueguen juntos. Pratto tiene condiciones para ir por afuera y hoy lo hizo bárbaro, armando las jugadas de los dos goles. Seguro que pueden jugar juntos, son inteligentes y si uno se tira atrás o al costado, el otro va por el medio”.
La lesión de Calgaro
Promediando el primer tiempo, Diego Calgaro empezó a tocarse la parte de arriba de su pierna y dio la impresión de que otra vez empezaba a molestarle la zona de los aductores que ya lo dejó afuera de la competencia en algunos encuentros. Pero esta vez fue un tirón en el recto y por eso Alí decidió su salida para que ingrese Saucedo.
Faltan cinco días para el partido con Deportivo Merlo (el sábado a las 19 en el 15 de Abril), por lo que resulta prematuro saber si estará o no en condiciones de jugar. Pero ayer se especulaba con posibles reemplazantes. ¿Cuál es el jugador de características más parecidas a Calgaro? Posiblemente no haya uno igual, pero el que jugaba en su lugar era Alexis Fernández, hoy en un nivel que no convence al técnico.
Con Saucedo afuera de los 11 titulares, si Matías sigue de doble cinco, es una opción válida que el correntino juegue desde el arranque otra vez. La otra opción es la del pibe Montero, que jugó bien ante Belgrano, sobre todo en el primer tiempo, y ayer se quedó afuera de los que firmaron planilla.
Después, habrá que ver cómo se decide a armar el sector izquierdo. Si busca dos reemplazantes naturales para los dos expulsados (Maidana y Torres), las opciones son Cardozo y Buján.
Pensando en Merlo, agregamos otra variante: Guerra por Cólzera. Es una opción válida que Pratto-Guerra jueguen por primera vez juntos desde el arranque. Ayer fueron clave para cambiar una historia negativa.

Más alto que todos
Renzo Vera se eleva y rechaza la pelota de cabeza. Fue en el segundo tiempo, cuando parecía que se consumaba una goleada en contra y el equipo de Alí sacó fuerzas y lo remontó.
Foto: gentileza diario El Litoral de Corrientes
Un estadio irreconocible
Hacía 13 años que el enviado de El Litoral no pisaba la cancha de Huracán de Corrientes. La última vez fue en aquél 2-2 de Colón con el local, cuando el sabalero peleó el campeonato con Pancho Ferraro en el “97. Antes, Unión había jugado un partido inolvidable ante el Huracán correntino: 6-3 para los tatengues en la primera fecha de su retorno a Primera División, en 1996.
El estadio está en ruinas. Es que Huracán debe casi 11 millones de pesos y no tiene recursos. Y Boca Unidos tuvo que aportar 150.000 pesos en el arranque de la temporada, al menos para pintar las plateas y darle un marco medianamente presentable al campo de juego propiamente dicho.
La cancha —la misma donde jugó Mandiyú en Primera y donde Maradona dirigió a ese equipo cuando estaba suspendido— no tiene iluminación artificial. Están las torres, pero los reflectores fueron entregados como pago de la deuda que tenían con un preparador físico que tuvo Huracán en su momento.
Esta semana actuará Alejandro Sanz, el cantante, en ese estadio. Como consecuencia de ello, anoche mismo se iniciaron los trabajos de montaje del escenario y se colocaron algunos artefactos eléctricos provisorios para que haya algo de iluminación para el acceso y egreso de la gente: el espectáculo será nocturno.
El partido con Unión se jugó a las 16 y con una temperatura que rondaba los 35 grados a la sombra, con mucha humedad. Fue inhumano y eso que los santafesinos estamos acostumbrados a este tipo de temperaturas. De todos modos, hay una realidad: Boca Unidos tiene que jugar de día, porque la cancha no tiene luz.

La gran figura
Lucas Pratto se quedó con la mayor parte de los méritos por las dos jugadas que terminaron en gol. Fue el hombre clave en momentos en que quedaban pocas piernas en todos.
Foto: Pablo Aguirre