Casamayor, Castillo y Hurtado, todos oriundos de ""la isla" centroamericana, vencieron en sus compromisos en la "Cartelera de Campeones".
Los boxeadores cubanos Joel "Cepillo" Casamayor, Eliseo Castillo y Diosbelys Hurtado salieron airosos este sábado en sus combates que formaron parte de una cartelera boxística denominada "Cartelera de Campeones", que se llevó a cabo en la ciudad estadounidense de Miami, en el American Airlines Arena.
Casamayor, por unanimidad
En la pelea estelar, la experiencia y la forma física de Joel Casamayor acabaron con el invicto del puertorriqueño Daniel Seda, a quien venció por unanimidad de los jueces. En un emotivo combate a 10 asaltos en las 130 libras, el cubano recibió el beneficio de los tres jueces con idénticos resultados de 98-92.
Casamayor deja su récord en 31-2 y 19 KO's, al tiempo que Seda se iba con marca de 20-1-1 y 16 KO's.
El cubano sacó la mejor parte desde el principio con un boxeo basado en su mayor experiencia, que le permitió conectar los mejores golpes, sobre todo sus ganchos y su mortal recto de izquierda, que casi siempre hicieron estragos en el rostro del boricua.
En el cuarto asalto, el puertorriqueño salió agresivo y trató de emparejar las acciones, algo que molestó a Casamayor, quien en el quinto se portó como un terremoto y le propinó un conteo a Seda.
El octavo fue un poco más nivelado, ya que Seda fue ganando en confianza al tiempo que Casamayor se presentó más calculador, tratando que no se le escapara la ventaja de las tarjetas.
En lo que se puede catalogar como una gran falta de respeto a un boxeador experimentado, Seda le sacó la lengua a Casamayor luego de un intercambio en el medio del ring en el noveno, pero el cubano le respondió con sus efectivos golpes para demostrarle por qué es todavía superior.
Casamayor quedará ahora a la espera de una revancha ante el mexicano Diego Corrales o el brasileño Acelino "Popó" Freitas, quienes se enfrentarán en agosto venidero.
Un castillo de golpes
Eliseo Castillo venció por votación unánime al ex campeón mundial de los pesos pesados, el estadounidense Michael Moorer, en pelea de semifondo a 10 asaltos, en la que los jueces vieron ganar al cubano 99-91, 97-93 y 97-93. De esta manera, Castillo dejó su foja invicta con 18-0-1 y 14 KO's, mientras que el veterano Moorer se fue con récord de 46-4-1 y KO's.
Los tres primeros asaltos -casi siempre de estudio- se inclinaron hacia el cubano, quien supo mantener la diferencia en las tarjetas desde el principio con un boxeo a distancia muy inteligente, mientras que Moorer buscaba afanosamente arrinconar a su rival para aplicar sus mañas de experimentado gladiador.
Moorer, sabiendo de su desventaja con los jueces, apretó las acciones en los rounds postreros pero el cubano mantuvo su elegante y dinámico boxeo para llevarse la importante victoria.
El cubano que faltaba
Por último, Diosbelys Hurtado, un ex campeón mundial de peso welter, venció por nocáut técnico en el segundo asalto al estadounidense Leo Edwards y dejó un récord de 38-3 con 25 KO's frente a la derrota número 15 frente a 14 victorias de su oponente en un combate pactado a ocho asaltos.
El cubano, un ex titular de la división en la Asociación Mundial de Boxeo (AMB), le propinó a su oponente un despiadado castigo, ya que en el mismo primer asalto lo envió a la lona por un fuerte derechazo.
En el siguiente round, Hurtado se apoyó en su mayor experiencia y rapidez y con un fuerte "swing' de derecha al mentón volvió a enviar a la lona a su rival, quien estuvo a punto de salirse del encordado.
Con uñas y dientes
La campeona mundial de la categoría supergallo (WIBA), la ""Tigresa" Marcela Acuña (55,200 kilos), le ganó por abandono en el cuarto round a la brasileña Mónica Salino Barbosa un combate realizado en el estadio del club Caja Popular de Tucumán. La formoseña lució en perfecto estado físico y anímico, y fue ovacionada por los más de dos mil espectadores que presenciaron la pelea que además le sirvió como preparación para la próxima defensa del título que ostenta, probablemente en setiembre.
El combate, pactado a 10 vueltas, tuvo su fin mucho antes del tiempo estipulado cuando Acuña metió una muy buena combinación de golpes que terminó con la resistencia de Barbosa y cuando su rincón arrojó acertadamente la toalla pese a que el árbitro le había dado el pase.