El juez de Instrucción de San Cristóbal, Aldo Precerutti, procesó a un hombre de 40 años, a quien se atribuye el homicidio de Felipe Gabriel Gorosito, ocurrido en la madrugada del pasado 28 de julio, en la localidad de Ceres.

El imputado, Daniel Alberto Busquets, confesó ante la Justicia haber dado muerte a la víctima de dos puñaladas, aunque intentó ensayar una justificación de su accionar con argumentos que fueron rechazados por el magistrado interviniente.

La noche del crimen, víctima y victimario habían coincidido en un local denominado "Bar y Pizzería Italiana", donde se desarrollaba una peña folclórica.

En momentos en que los parroquianos se habían retirado del lugar para utilizar como baño una escuela abandonada, ubicada a pocos metros del bar -dado que las instalaciones sanitarias del mismo se encontraban fuera de servicio-, Busquets y Gorosito se cruzaron.

La resolución judicial destaca que "entre víctima y victimario existía una situación de encono de origen económico, por lo que habremos de estimar que, en esta situación, y encontrándose ambos contendientes a corta distancia, medió un intercambio verbal que desembocó en una agresión física, debido a las lesiones existentes en el rostro de ambos, constatadas por el médico actuante.

"Así los hechos -prosigue el magistrado-, Busquets extrajo de entre sus ropas un cuchillo marca `El Chajá', de 20 cm de hoja, asestándole dos puñaladas a Héctor Gorosito".

Testigos del hecho trasladaron a la víctima desde el lugar del hecho -avenida Italia al 200- hasta la clínica Mater Dei, donde finalmente falleció a raíz de una incontenible hemorragia interna.

El tribunal descarta la versión del imputado, según el cual "la víctima se abalanzó sobre él, produciéndose las lesiones al impactar contra el arma que tenía empuñada, con intenciones de alejarlo ante la diferencia física existente entre ambos".

Agrega el resolutorio que "de acuerdo con el informe médico y las fotografías, las heridas se produjeron en el hipocondrio y flanco izquierdo de la víctima, lo que echa por tierra las declaraciones brindadas, ya que, si los hechos se hubiesen desarrollado como el encartado pretende demostrar, las heridas deberían contar con una ubicación frontal y no tener su ingreso como refiere la autopsia: de izquierda a derecha, de adelante hacia atrás, de abajo hacia arriba".

El juez Precerutti también pone de relieve que, si bien las dimensiones físicas de la víctima eran superiores a las del victimario, "el hecho de portar el segundo un arma blanca de las características del cuchillo secuestrado pone de relieve un mayor poder ofensivo, creando entre ambos situaciones de desigualdad en lo que al mismo refiere, más aún si tenemos en cuenta que no se encontraba el encartado en una situación de matar o morir.

"Por las consideraciones expuestas -concluyó el magistrado-, surge que Daniel Alberto Ramón Busquets asestó en forma intencional a Héctor Felipe Gorosito dos puñaladas, siendo una de ellas la causa directa del deceso, por lo cual dicha conducta es encuadrable como homicidio simple".

Según se recordará, fuentes cercanas a la investigación aseguraron que la víctima adeudaba al imputado unos siete mil pesos, situación que habría dado motivo a continuos reclamos -y últimamente, amenazas de muerte- por parte del acreedor.

Los deudos de Gorosito -quien dejó tras de sí a una esposa y dos niños de 4 años y 15 días, respectivamente- decidieron efectuar un reclamo por daños y perjuicios, por lo cual se presentaron como actores civiles en el proceso penal, patrocinados por los Dres. Daniel Roca y Hugo Sartori.

En la misma resolución judicial que se dispuso el procesamiento de Busquets, el magistrado interviniente ordenó el embargo de los bienes del imputado por la suma de diez mil pesos.