Hubo reuniones entre el ministerio de Educación y el Ministerio Público Fiscal para avanzar con la identificación y la posterior condena a los responsables de los llamados intimidatorios.
El Litoral Lejos de desaparecer, los avisos por amenazas de bomba en las escuelas de la ciudad de Santa Fe se multiplican. En lo que va del año, según datos que pudo averiguar El Litoral, ya se registraron más de 30 llamados intimidatorios. Como se explicó en la oportunidad, cada vez que se recepciona una comunicación de este estilo, la policía santafesina despliega un operativo especial que demanda un costo de entre 30 y 40 mil pesos, dependiendo los casos. Además, de este gasto al erario público, se generan trastornos para la comunidad educativa de cada institución por la pérdida de tiempo que significa. Ante este panorama, desde el Ministerio de Educación y el Ministerio Público de la Acusación se trabaja en conjunto para lograr la identificación y la posterior condena para los responsables de estas comunicaciones. Este jueves, Juan Cruz Jiménez, de la Regional IV de la cartera educativa, brindó una conferencia de prensa donde señaló: “Creemos que estamos cerca de la sanción civil y económica que el responsable deberá asumir”. El funcionario también recalcó que se continúa trabajando “puertas adentro” con actividades reparadoras, con reuniones con padres y los protocolos de prevención.
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