Contra las Cuerdas
Insólito
Curtis Harper, un boxeador estadounidense de 30 años con marca de 13-6 y 9 nocauts, abandonó de manera insólita el ring del Minneapolis Armory en Minnesota, la noche del viernes, cuando apenas daba comienzo la batalla, terminando descalificado por el referí en turno y otorgándose la victoria a Efe Ajagba, quien ganó sin tirar un golpe.
El programa de peleas de la cartelera de Warriors Boxing contemplaba el encuentro entre Harper y el invicto Ajagba (6-0, 5 Ko’s) como uno de los que se iban a televisar a través de FS1. En la estelar, Willie Monroe ganó por puntos a Javier Maciel en la división de los pesos supermedianos, y en la coestelar, el mexicano Mahonry Montes perdió en dos rounds ante Jamal James.
Retuvo Lemos
Al grito de “olé, olé, olé, olé... Tito, Tito” comenzó la noche de Gustavo Lemos y con el mismo cántico, terminó. El púgil local sacó a relucir su técnica ante un rival como Néstor “Cacique” Armas, que se mostraba peligroso de antemano y que fue audaz a la hora de plantear la pelea, y le ganó por KOT en el cuarto asalto, reteniendo así su título Latino Federación Internacional de Boxeo en la categoría Ligero. La velada se realizó en la localidad de Tres Arroyos, provincia de Buenos Aires.
Lemos se hizo sentir desde el comienzo, cuando conectó al venezolano apenas sonada la campana. Estaba confiado y se notaba: hizo cintura y aprovechó la zona baja para desestabilizar a Armas. “Y pegue, y pegue, y pegue Tito pegue” cantaba la gente en el descanso, haciendo sentir la localía.
En el segundo asalto, el venezolano fue llevado a las cuerdas y casi se cae del ring ante la potencia de las combinaciones de Tito (que además abrió su abanico de golpes hacia la zona alta aprovechando, sobre todo, los rectos), que a pesar de saberse ganador en las vueltas, nunca perdió el control.
El tercero fue distinto. Armas se mostró guapo y aguantó las embestidas, incluso haciendo tambalear a Lemos en el final, cuando logró conectar una derecha arriba.
Pero en el cuarto se desató el huracán. Tito Lemos se vio golpeado en su orgullo y salió a moler a su rival, quien intentó frenarlo, pero terminó desistiendo en su rincón luego de que el referí le contara y notara que no daba para más.
Gustavo Tito Lemos fue una máquina una vez más y retuvo su cinturón ante un rival de buenos pergaminos (incluso se notó que tardó mucho en recuperarse) y que terminó cayendo ante un Lemos que cada día da más que hablar.