Ante las “provocaciones” de Pyongyang
Corea del Sur endurece su postura y despliega su capacidad militar
Corea del Sur exhibió su capacidad militar al conmemorar el Día de las Fuerzas Armadas en un acto que subraya el progresivo endurecimiento del discurso de Seúl frente a Pyongyang ante la escalada de tensión entre el gobierno comunista de Kim Jong-un y su aliado estadounidense.
Soldados surcoreanos realizan ejercicios militares en una localidad muy próxima a la frontera con Corea del Norte.
Foto: Agencia DPA
Redacción de El Litoral
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Télam - EFE
El presidente surcoreano, Moon Jae-in, instó a fortalecer las capacidades defensivas del país y advirtió que responderá con un “duro castigo” a las “provocaciones” de Pyongyang, aunque sostuvo que su gobierno está haciendo todos los esfuerzos para evitar un choque bélico y que su objetivo es preservar la paz.
“La determinación de nuestro gobierno para proteger la paz requiere de unas capacidades defensivas fuertes. Responderemos a las provocaciones temerarias con un duro castigo”, dijo Moon en una ceremonia para conmemorar hoy los 69 años de las Fuerzas Armadas, que se cumplen el domingo.
El despliegue militar incluyó unos 3.700 efectivos y la exhibición de armamento estratégico, incluyendo misiles de crucero Hyunmoo-3 y el último modelo de misil balístico surcoreano, el Hyunmoo-2C, que tiene un rango de unos 800 kilómetros y hoy se mostró públicamente por primera vez, según reportó la agencia de noticias EFE.
En este escenario, Moon insistió en la necesidad de completar la implementación del sistema Kill Chain (pensado para atacar preventivamente al detectar preparativos para un ataque nuclear) y el de Defensa Aérea y de Misiles de Corea (KAMD por sus siglas en inglés), pensado para interceptar proyectiles balísticos.
“Podemos prevenir las provocaciones nucleares de Corea del Norte si la disuasión que implica la alianza entre la República de Corea (nombre oficial del país) y Estados Unidos se manifiesta de manera efectiva”, subrayó Moon.
En detrimento del complejo militar de Gyeryongdae (140 kilómetros al sur de Seúl) donde se suele celebrar este acto, en esta ocasión se optó por el cuartel de la Segunda Flota de Marina en Pyeongtaek (70 kilómetros al sureste de la capital surcoreana), localidad que en el futuro acogerá además al grueso de las tropas de EEUU.
Hipótesis de conflicto
Pese a remarcar la importancia del vínculo militar con Washington, el presidente surcoreano consideró que su país necesita recuperar pronto el control operativo de sus tropas en caso de guerra, el cual corresponde actualmente al Pentágono.
“Corea del Norte nos temerá más y el pueblo tendrá más fe en nuestro Ejército, si tenemos el control operativo de nuestras tropas”, añadió.
El endurecimiento de la posición surcoreana se produce luego de que Moon iniciara su mandato en mayo pasado con una propuesta de diálogo al régimen de Kim Jong-un, que Pyongyang rechazó argumentando que Seúl debía desligarse de la influencia de Washington.
Desde entonces, Corea del Norte lanzó 10 misiles balísticos (entre ellos, sus primeros proyectiles de alcance intercontinental) y efectuó un test nuclear el 3 de septiembre, lo que le valió nuevas sanciones de la ONU aplaudidas por Seúl, que pidió más rigidez a la comunidad internacional a la hora de implementarlas.
El diario norcoreano Rodong Sinmung aseguró hoy que unos 4,7 millones de ciudadanos pidieron alistarse o realistarse a las filas del Ejército Popular de Corea (KPA) en los seis días transcurridos desde que el líder Kim Jong-un arremetiera contra las palabras del presidente estadounidense, Donald Trump, ante la ONU, donde amenazó con “destruir totalmente Corea del Norte”.
Ante este panorama el director del Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA), el japonés Yukiya Amano, tiene previsto llegar hoy a Seúl, donde se reunirá con la canciller surcoreana, Kang Kyung-wha, para tratar el programa de desarrollo armamentístico norcoreano.
“Su visita será una oportunidad para discutir en profundidad la colaboración entre las dos partes de cara a resolver la cuestión nuclear de Corea del Norte”, explicó en un comunicado el Ministerio de Exteriores surcoreano.
El gobierno chino articula las sanciones económicas
El gobierno chino ordenó hoy el cierre de todas las empresas de Corea del Norte asentadas en China y de las de capital mixto en un plazo de 120 días en cumplimiento de sanciones aplicadas por la ONU al pequeño país comunista por su más reciente ensayo nuclear.
La decisión de Beijing, que busca presionar a Corea del Norte para que detenga sus programas de desarrollo de armas nucleares y misiles, se conoció hoy a través de un comunicado oficial del ministerio de Comercio chino, según informaron la agencia de noticias oficial china Xinhua y la española EFE.
El texto precisa que las empresas y proyectos de infraestructuras sin ánimo de lucro quedan exentos de la medida que, por el contrario, también afectará a las empresa con capital chino y norcoreano establecidas en el exterior.
Las autoridades chinas fundamentaron las sanciones, una de las más duras adoptadas por el país tradicionalmente aliado a Pyongyang, en la resolución 2375 adoptada por unanimidad por el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas el pasado 12 de septiembre.
En el marco de esta resolución, China ya anunció hace una semana la restricción del suministro de petróleo al país vecino, así como la prohibición general de las importaciones de textiles norcoreanos, con el objetivo de presionar al gobierno de Kim Jong-un.
La República Popular de China es el principal socio comercial de Corea del Norte pero en los últimos meses aceptó la aprobación de duras sanciones por parte del Consejo de Seguridad a raíz de la escalada armamentista desarrollada en los últimos meses.
En contraste con Estados Unidos, Beijing continúa abogando por la necesidad de proseguir el diálogo para reducir las tensiones en la región e insiste en que el uso de la fuerza militar no debe ser una opción.
No obstante, Washington y otros actores de la comunidad internacional siguen pidiendo a China que aumente su presión sobre el régimen de Pyongyang, tanto diplomática como económicamente.