Juan Manuel Fernández/INTA
[email protected]
Enviado Especial
En su Estación Experimental “La Palmira” -631 hectáreas de suelos clase VI y VII en Las Avispas, departamento San Cristóbal- el INTA ensaya alternativas y prueba tecnologías para apuntalar la rentabilidad de la cría bovina, principal actividad económica de la región.
Lejos de ser un modelo “de laboratorio”, el planteo es tan realista que se desarrolla sobre un campo alquilado y con un sólo empleado. Además, afronta las mismas limitantes que tienen los ganaderos de la zona: alta dependencia del régimen de lluvias, principal variable que determina la oferta forrajera natural, otro condicionante de importancia, y dificultad para la detección de agua subterránea de calidad aceptable. Incluso han tenido que lidiar con enfermedades como la tricomoniasis, que ingresó al establecimiento por falta de mantenimiento de alambrados, y también la garrapata.
“La problemática de la zona se debate en un delicado equilibrio entre costos altos y baja producción”, dijo del jefe de la AER San Cristóbal, Juan Ibarlucea, durante la jornada a campo realizada el martes 5 de agosto para mostrar el sistema. Ante unos 250 asistentes, el técnico describió el planteo, basado en estacionamiento del servicio “para hacer coincidir el momento de mayor demanda de la vaca con la de mejor oferta forrajera”, evaluación sanitaria permanente de los toros, determinación de Condición Corporal (CC) del plantel de vientres durante todo el ciclo productivo, destete precoz, hiperprecoz o temporal -cuando la situación lo requiera- y suplementación proteica de vaquillonas.
El contingente recorrió todo el establecimiento y se detuvo en cuatro “paradas”, en cada una de las cuales distintos especialistas del INTA mostraron la tecnología aplicada: manejo del rodeo, cosecha de agua y extracción subterránea con sistema “pata de araña”, forrajes diferidos (grama rhodes, sorgo y melilotus) y recría (pastoreo rotativo y suplementación).
“Actualmente el porcentaje de terneros logrados en el distrito Las Avispas es menor al 50 %”, indicó Ibarlucea, mientras en el ciclo 2012/13 “La Palmira” superó el 75%. Aún pagando un alquiler alto, de 3 kilos de novillo por hectárea al mes, el último ejercicio económico fue positivo en $100 por hectárea (sin restar amortizaciones), una cifra muy modesta que descarta la viabilidad del negocio en campo arrendado pero la confirma para los propietarios. “El valor del alquiler que pagamos es el retiro que podría tener un productor dueño de la tierra”, resumió el técnico.
Estado corporal
y sanidad
En la parada “Manejo del rodeo”, los participantes pudieron observar la condición corporal de las vacas que empiezan a parir y las vaquillonas que entrarán a servicio en la próxima primavera. Este dato es fundamental en función del servicio estacionado entre el 15 de noviembre y el 15 de febrero (acomodado de esa manera para acompañar la producción de pasto del campo). La evaluación durante el tacto preservicio determina la necesidad o no de hacer destetes de manera precoz o hiper precoz. En el inicio del servicio 2013/14, el 80% de las vacas estaban en una CC menor e igual a 2,5 y ese 80% estaba en anestro. “Este dato fue crucial para tomar la decisión de destetar al 76% de esos animales”, explicó la veterinaria Ivana Diruscio.
La tecnología permitió obtener 91% de preñez general. “Es importante que el productor esté atento en este período, y fundamental que los veterinarios ayuden a la toma de decisión del productor y acompañen los diferentes momentos de producción”, destacó el especialista del INTA Martín Maciel.
Otro técnico del organismo, Alejandro Abdala, señalo: “la tricomona nos pegó porque era un rodeo sano”. El veterinario contó el impacto de la enfermedad en el campo y cómo afectó la producción, por lo que remarcó la importancia de realizar raspajes a los toros para mantener al rodeo sano. También hizo hincapié en los beneficios de contar con un rodeo libre de brucelosis y tuberculosis y explicó la utilización de las vacunas contra anaplasma y babesia y la importancia de que el rodeo actualmente se encuentre inmunizado principalmente por la aparición en la zona de garrapatas transmisoras de babesia.
Proposiciones sobre el agua
En la estación siguiente, dedicada al agua, el geólogo del INTA Rubén Tosolini puso el énfasis en tres premisas fundamentales: cantidad, calidad y oportunidad.
Primero se visitó el tanque chaco (tanque de tierra sobreelevado) ubicado en el centro del campo, que actúa como reservorio para las épocas de escasez, donde se almacena agua de muy buena calidad extraída por un sistema “pata de araña” y por medio de la represa que está a la par y cosecha agua de lluvia. Desde allí se provee agua a todos los bebederos del campo. En establecimientos con mala calidad de agua subterránea además puede servir de tanque mezcla, para mejorar la calidad incorporando agua de lluvia. La idea es que los animales consuman la misma calidad de agua durante todo el año.
El sistema “pata de araña”, consiste en cuatro perforaciones a una distancia considerable una de otra (30 metros) que se unen en un molino común. La distancia permite que las perforaciones no compitan entre sí y de esta manera no disminuyan la calidad del agua extraída, que actualmente está en menos de 2 gramos de sales. A su vez, cada perforación tiene en el comienzo un filtro hecho de arena y piedra que, mediante ranuras en la camisa de la perforación, permiten incorporar agua de lluvia al acuífero, ya que se encuentran en un lugar bajo del campo. Además, como novedad, cada caño de cada perforación cuenta con llaves que permiten regular la cantidad de agua, disminuyendo la exigencia del pozo en caso de que cuente con menos capacidad para recuperarse.
Forraje todo el año
Otra “pata” para la producción del campo es la base forrajera. Para ello, en la parada forrajes, el experto Luis Romero mostró un sorgo que se utiliza diferido. Explicó cómo se van rotando y preparando los lotes para terminar en una gramínea subtropical “caballito de batalla de estos campos” como es el grama rhodes.
En suelo clase VII se observa el sorgo sembrado en febrero. El grama rhodes o el sorgo en forma diferida, cubren un bache invernal donde el pastizal natural no es tan bueno o disminuye la producción. Como verdeo invernal, el melilotus es una buena alternativa, siempre y cuando se lo siembre temprano (febrero) para que dé forraje en agosto y no más tarde cuando ya comienzan a prosperar los pastizales naturales o las subtropicales implantadas. Actualmente el sorgo se consume de manera frontal por una categoría con altos requerimientos como es la vaquillona preñada.
Recría a tiempo
La última parada de La Palmira, a cargo de Ibarlucea, fue la recría de terneras. Se presentó un lote de 11 hectáreas que tuvo un raleo de arbustivas en el 2010 y en el que luego prosperó el grama naturalizado y otras especies nativas aumentando significativamente la oferta forrajera.
Se dividió al lote en 11 parcelas, para hacer un sistema rotativo con las terneras. Son 24 animales que cambian de parcela cada 4 días y consumen expeller de girasol, de manera discontinua. La suplementación discontinua consiste en dividir la comida que deben consumir durante una semana en tres días semanales. El objetivo es no complicar al personal con una rutina diaria de suplementación, permitiéndole realizar otras tareas en esos momentos y poder tomar los descansos semanales merecidos.
Es importante tener en cuenta la recría de la ternera, principalmente en el primer año de vida, para llegar a pesos de entore adecuados. “Terneras que al destete en abril están por debajo de 160 kg probablemente no llegarán a la fecha de servicio con adecuado peso”, expresó Ibarlucea.
Composición forrajera
*Superficie total: 631 hectáreas
*Pastizales naturales: 492has (78%)
*Grama Rhodes: 87has (13.8%)
*Sorgo silero: 37has (5.7%)
*Melilotus: 10has (1.6%)
Ficha productiva 2012/13
*Vientres entorados: 360
*EV/ha: 0.66
*Preñez: 86%
*Parición: 75.3%
*Terneros logrados: 271
*Destete: 75.3%
*Peso promedio al destete: 119kg