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Es delantero de Instituto de Córdoba

Ábila: “Me llamaron de Unión”

De la Redacción de El Litoral

El delantero de Instituto de Córdoba, Ramón Ábila, reconoció en declaraciones a los medios cordobeses un contacto con Unión y automáticamente derivó la situación a la directiva albirroja.

La necesidad de Instituto por generar dinero hace pensar, cada vez que suena el teléfono de un directivo y escucha del otro lado alguna propuesta por algún jugador, en que el panorama puede cambiar. Y, precisamente el sábado sucedió eso. A Ramón Ábila lo llamaron de Unión de Santa Fe y le preguntaron si estaba en condiciones de pasar al “Tate”.

De inmediato, “Wanchope” le pasó la pelota a Daniel Peralta. “Sé del interés de Unión, pero les dije que llamen a Peralta para hablar con él el tema económico”, le dijo el delantero a “La Voz del Interior”.

El vicepresidente Carlos Giusti no quiso hacerse falsas expectativas y, aunque confía en un posible traspaso del goleador, le bajó los decibeles a la situación. “Fue una primera charla informal donde ellos dejaron en claro la intención de contar con Ábila para la segunda parte del torneo. En la semana puede haber más novedades”, expresó el dirigente.

“Si me voy, quiero que ese dinero sirva, por lo menos, para llegar hasta las elecciones con tranquilidad. No quiero que me vendan de apurados”, dijo el “9”.

Ábila, que es hincha de la Gloria, aclaró: “Si me voy, quiero que ese dinero sirva, por lo menos, para llegar hasta las elecciones con tranquilidad. No quiero que me vendan de apurados y que en dos semanas se acabe esa plata y vuelvan los problemas. Yo quiero hacer lo que sea mejor para el club”, dijo “Wanchope” y agregó: “Yo sé, porque veo cada día, los problemas que tiene el club. Y, si puedo colaborar para que en algo se solucione, bienvenido sea”.

Cabe recordar que el delantero se fracturó el cúbito derecho el pasado 13 de noviembre frente a Gimnasia (J) y se perdió los últimos cuatro encuentros de la primera rueda de la B Nacional. Sin embargo, Ábila es con siete tantos, junto a Juan Martín, el goleador de Instituto en lo que va del torneo.

“El lunes ya tengo el alta médica. En estos días estuve trotando sin problemas. Entrené para no perder el ritmo. El problema es que todavía no puedo tener contacto. Cuando empiece la pretemporada iremos viendo junto al doctor Ambrosini cómo evoluciona el brazo, pero creo que voy a poder trabajar con normalidad desde la segunda semana”, dijo, casi como un deseo, Ábila.

Instituto, obviamente, necesita dinero: en enero, más allá de los gastos fijos mensuales, el club debe regularizar la deuda con sus empleados tal como se comprometió con el Ministerio de Trabajo. Claro está que en época de sequía es bueno el ingreso de pesos/dólares, pero “Wanchope” no quiere que lo “regalen” por una urgencia.



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