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Susto en la Recoleta santafesina

Fuga, persecución y captura

  • Un preso escapó anoche mientras cumplía un trámite en la seccional 2a. La persecución terminó luego en la Recoleta donde fue recapturado.
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El frustrado escapista es el acusado de dar muerte a José Marel (55), el dueño de un taller de electrónica que fue asesinado de 20 puñaladas el 16 de noviembre, en Guadalupe. Foto: Manuel Fabatía

 

Danilo Chiapello

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Un peligroso delincuente escapó anoche de la Policía, lo que motivó un gigantesco operativo de búsqueda que culminó poco después con la recaptura de aquél en la Recoleta santafesina.

La secuencia se inició cerca de las 20 en barrio Sur, más precisamente en la puerta de la seccional 2a., en Gral. López y Saavedra.

A dicho lugar había arribado el móvil de Trámites y Libertades (se utiliza para el traslado de personas privadas de su libertad) con dos presos en su interior.

Como indica el protocolo para estas lides, los internos viajaban en la parte posterior del rodado, esposados entre sí, y asegurados a un soporte fijo que tiene este vehículo adaptado especialmente para el transporte de detenidos.

Pero cuando llegó el momento de hacer descender a los presos, comenzaron los problemas.

Ni bien el guardia destrabó una de las esposas, ambos rufianes se abalanzaron contra el uniformado, a punto tal que lo hicieron caer al suelo.

Acto seguido repitieron la acción con el segundo policía, a quien dejaron fuera de juego tras pegarle un portazo.

El momento de confusión fue aprovechado al máximo por uno de los rufianes que se lanzó a la carrera y se perdió en las inmediaciones.

No fue igual la suerte para su compinche de fuga, el que resultó apresado en el mismo lugar por los restantes policías que habían advertido el incidente.

Así las cosas, todos los esfuerzos se concentraron en dar con el evadido.

Y no pasó demasiado tiempo cuando a oídos de los pesquisas llegó un dato revelador. A la vuelta de la seccional 2a. un sujeto joven había subido a un remís de manera desesperada.

Para no levantar sospechas ante su lógico apuro, este inusual “pasajero” comentó a los gritos que había sido víctima de un asalto.

De inmediato, casi la totalidad de los vehículos policiales que se encontraban patrullando la ciudad quedaron afectados a la búsqueda.

En medio de estos trabajos, se supo que el remís en cuestión había sido visto circulando por la zona de la Recoleta santafesina.

Segundos después, varios móviles interceptaron el coche de alquiler en República de Siria y Castellanos, donde los uniformados concretaron la recaptura.

Con los recaudos del caso, el sujeto fue trasladado ahora hasta el cuartel central de la Unidad Regional I donde permanece alojado bajo una fuerte custodia.

El frustrado escapista resultó ser Miguel Ángel Bertrán, de 20 años, un individuo calificado como de máxima peligrosidad.

El nombrado se encuentra detenido e imputado de la muerte de José Marel (55), quien perdió la vida la noche del 16 del noviembre, en su vivienda de barrio Guadalupe, tras recibir no menos de 20 puñaladas.



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