AL MARGEN DE LA CRÓNICA

No todas son malas noticias

Las intensas y frecuentes lluvias, las fuertes tormentas y las tórridas jornadas de temperaturas altísimas fueron algunas de las características que definieron a la temporada estival. Con su consiguiente impacto en distintas áreas productivas, desde la horticultura hasta la lechería. De hecho, los tamberos santafesinos sufrieron el impacto de las extraordinarias lluvias en las pasturas. Y las palabras expresadas semanas atrás a El Litoral por el presidente de la Sociedad Rural de Las Colonias resumen el cuadro de situación del sector. “Éste ha sido uno de los peores veranos que hemos vivido, no sólo por el exceso de agua, sino por las temperaturas” dijo Gustavo Vionett.

Sin embargo, no hay únicamente malas noticias para el entramado productivo de la cuenca lechera, ya que el viernes pasado se produjo un hecho auspicioso, cuando quedó formalmente inaugurado el moderno quirófano y el área de internación para grandes animales del Hospital de Salud Animal en la Facultad de Ciencias Veterinarias. Un espacio que, además de ser único en su tipo en el país, apunta a que profesionales del área tengan la posibilidad de dar aprovechamiento “a la moderna aparatología y procedimientos diagnósticos que el avance científico y tecnológico les ofrece”. Al menos, en esos términos se expresó una de las autoridades presentes en la ceremonia.

La inauguración de un centro de estas características en la ciudad de Esperanza adquiere una gran relevancia para toda la región. En primer lugar, porque sirve para consolidar el prestigio que tiene una institución como la Universidad Nacional del Litoral; y en segundo término porque ofrece a los alumnos la posibilidad de adquirir experiencias directas antes de culminar su formación profesional. Pero además -y éste también es un dato sobresaliente- porque ofrecerá servicios nuevos especializados para una de las zonas productivas más importantes de la provincia y el país.