Representa una de las mayores reformas sociales en la historia de Estados Unidos.
Histórico triunfo del gobierno de Obama
tras la aprobación de la reforma sanitaria
El nuevo sistema de salud intentará dar cobertura sanitaria a más de 30 millones de estadounidenses que en la actualidad carecen de ella.
EFE-Télam
La Cámara baja del Congreso de los Estados Unidos, aprobó anoche la reforma del sistema sanitario, en una victoria clave de los demócratas luego de la promesa que el presidente Barack Obama, realizara llegado a la Casa Blanca hace 14 meses.
Obama dijo que la aprobación de la reforma sanitaria “representa otra piedra firmemente establecida en la fundación del sueño americano”.
El mandatario habló cerca de la medianoche del domingo (la 1 del lunes en la Argentina) minutos después de que los demócratas de esa cámara consiguieran los votos positivos de las tres votaciones necesarias para la aprobación de la iniciativa.
Con este logro “probamos que este gobierno, el gobierno de la gente y por la gente, aún funciona para la gente”, agregó desde la Casa Blanca y en compañía de su vicepresidente, Joe Biden.
Con 219 votos a favor -tres más de los 216 necesarios- y 212 en contra, la Cámara de Representantes aprobó ayer la mayor ampliación de las garantías sanitarias en el país desde que se crearon los servicios de Medicare (que da cobertura a los jubilados) y Medicaid (que protege a los más desfavorecidos) hace cuatro décadas. La Cámara baja aprobó un segundo paquete de medidas que incluye enmiendas a la reforma, y que deberá ser aprobada por el Senado, lo que podría ocurrir el viernes o sábado próximos.
La reforma sanitaria ha sido la gran prioridad de Barack Obama en su primer año de mandato, por lo que su aprobación ha sido interpretado como un gran triunfo para su gobierno.
La iniciativa, que fue rechazada por todo el bloque republicano de la Cámara de Representantes, busca dar cobertura sanitaria a más de 30 millones de estadounidenses que en la actualidad carecen de ella.
Entre otros aspectos, la reforma prohibirá a las aseguradoras rechazar dar cobertura a personas que ya padezcan alguna enfermedad y hará obligatorio para la mayoría de los residentes el contar con un seguro médico.
En declaraciones a la cadena CBS, la secretaria de Salud de EE.UU., Kathleen Sebelius, reconoció que una parte de la población estadounidense se mantenía escéptica sobre la reforma, pero se mostró confiada en que la apoyarán cuando conozcan con detalle su contenido.
La secretaria atribuyó la oposición de la gente a los mensajes negativos que han lanzado los republicanos en los últimos meses, y que contenían afirmaciones como que se recortarían los servicios que se prestan actualmente a través del Medicare o que a las familias se les impediría elegir el médico que quisieran.
Entre las principales modificaciones que sufrió desde la primera aproximación, fue la inclusión de la opción pública considerada en un inicio, su costo que varió en cada una de las propuestas presentadas por Diputados, el Senado y por el líder de la Casa Blanca, así como el lenguaje respecto al alcance de la ayuda federal sobre la práctica del aborto.