La actual situación por la que atraviesa nuestro país enfrenta desafíos multifacéticos que abarcan desde la desocupación y la disgregación social hasta la preocupación por el sistema educativo y de investigación científica. Los mismos requieren de un abordaje y compromiso colectivo fundado en valores fundamentales como la familia, la educación y la cultura del trabajo, siempre presentes y defendidos por la Mesa del Diálogo Santafesino.
Las instituciones educativas, en especial las universidades, juegan un papel crucial en este escenario, no solo como centros de formación académica sino también como motores de innovación y desarrollo científico-tecnológico. El acceso equitativo a la educación universitaria es un pilar para la igualdad de oportunidades, permitiendo que todos los ciudadanos, independientemente de su origen socioeconómico, puedan contribuir al progreso de la nación.
Sin embargo, los problemas de financiamiento en el sistema educativo y científico-tecnológico pueden socavar este pilar, limitando la capacidad de las universidades -en particular- para cumplir con su misión. Paralelamente, la situación laboral de los trabajadores, tanto en el sector público como en el privado, refleja las tensiones económicas y sociales que vive el país, especialmente en tiempos de recesión, que se concretizan en despidos y recortes laborales.
El crecimiento de la pobreza, particularmente entre los más vulnerables como los niños y los ancianos, es otra de las problemáticas hoy muy presentes. Esta compleja y delicada situación requiere un llamado a la acción urgente, donde la educación, la ciencia y la protección de los trabajadores y los grupos más desfavorecidos no se vean afectados en tiempos de ajuste económico. Defendemos la presencia y participación de un Estado eficiente y racional, pero al mismo tiempo es crucial que se encuentren soluciones que ofrezcan oportunidades equitativas para mitigar la situación social y asegurar un futuro sostenible para todos los ciudadanos.
Finalmente, reiteramos el llamado a la paz. En el contexto de los conflictos entre Ucrania y Rusia, así como en el Medio Oriente profundizado en los últimos días, es fundamental fomentar la reconciliación y alentar soluciones pacíficas que pongan fin al sufrimiento de las personas inocentes afectadas por estos enfrentamientos. La guerra trae consigo una devastación que va más allá del momento actual, afectando a generaciones futuras y obstaculizando el progreso hacia un mundo más justo y equitativo. Por lo tanto, es esencial que se intensifiquen los esfuerzos para el diálogo y la colaboración en la búsqueda de una paz duradera.
La paz no solo es un fin en sí mismo, sino también un medio indispensable para el desarrollo sostenible y la prosperidad de una nación a partir de la educación, el desarrollo científico y tecnológico, el trabajo digno y el cuidado de la vida, en especial de los más vulnerables. Por ello, exhortamos una vez más al compromiso de todos para que a través de la escucha, el diálogo y la cooperación encontremos el camino más adecuado para construir una sociedad más justa y equitativa.
(*) Documento firmado por el profesor Javier Francisco Aga (secretario de Relaciones Institucionales de la UNL) y el magíster Eugenio Martín De Palma (rector de la UCSF), secretario ejecutivo y presidente pro tempore de la Mesa del Diálogo Santafesino, respectivamente.
Dejanos tu comentario
Los comentarios realizados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y las consecuencias derivadas de ellos pueden ser pasibles de las sanciones legales que correspondan. Evitar comentarios ofensivos o que no respondan al tema abordado en la información.